INTERVENCION EN LICEO NOCTURNO N°11

¿Cómo crear un vínculo educativo desde la diferencia?

¿Cómo habitar el no lugar?



¿Que buscamos en el jardín? ¿Es necesario atravesar el calvario? La cotidianeidad me resulta brusca, compleja y brutal. Bruscos los recuerdos y pasiones tristes, alegres. Aletargado en el tiempo la sensación de vacío, cansancio y un dejo de esperanza que permite respirar con un poco de liviandad. A veces el pecho no resiste, a veces el hecho de dejarse morir es una forma alternativa de permitirse vivir en la encrucijada de la vida. Es hostil, pasional, te atropella y obliga a existir en el medio que toque. Toca pelearla, toca mala suerte, buena racha.
Hoy soy el rayo que ilumina al sol
y lo hago brillar sin saber por qué.
Es que a veces puede suceder
que seas más que vos.
Es que a veces sos el rayo que
hace brillar al sol.
Hay
tanto para decir
de esta vuelta atrás
de esta espiral
de tallos verdes
con hongos blancos.
Hoy
la emoción de tocar
tiene que erizar
en cualquier lugar...
igual sin ojos
pero llorando
Hay
que correr otra vez
desertando de lo que hablar
¡desertando!
El afecto,
la construcción de sujeto y la política, son conceptos que han ido de la mano a lo largo del presente recorrido, el giro afectivo ganó espacios, desde la educación y en otras áreas de la vida es necesario y no suficiente, darle primacía a lo vincular, esto colabora con la construcción de identidad, el afecto aparece como previo, visceral, corpóreo como fuerzas e intensidades que influyen en nuestra acción.
El liceo 11 es el reflejo de un Uruguay que intentando brindar todo, nos dejó sin nada, y por eso se lucha y honra el “salir de abajo”, la meritocracia, y el desalentador concepto que criamos de “me tengo que romper el lomo para estudiar” educarse es un esfuerzo? lleva peso…¿la libertad pesa? recuerdo el volumen de mi voz cuando intervine en una clase de leonardo en la que yo le decía a los gurises “tienen que estudiar para que no los pisen, discutan, hablen con otros, así no los maniobran los de arriba” (bien sabemos que de alguna u otra forma, las relaciones de poder nos oprimen en modos sutiles o exagerados, pero como la esperanza es mi escudo ante la adversidad, lo dije) el espacio educativo es eso, lo que no es obvio, lo intenso y la emocion de estar, lo inadmisible, el problema dinámico

alentados por las pasiones buenas, el entusiasmo por el cambio, el abrazo que no se pide, y la metodología de captar lo inaccesible, el esfuerzo político, la transformación de educarse y adueñarse del futuro, el preámbulo , el nosotros, una gran manada sin olvidar lo que cada uno. nos asaltan las preguntas, con la esperanza a cuestas y la ilusión de compartir el escenario educativo, en todos los escenarios poder transformar y transformarse.
los relatos regalaron la posibilidad del compromiso de hacer algo en el liceo, abrigar la memoria, las infancias, abrigar la necesidad de aprender, transformar, repensar la relación

desde mi subjetividad contemplando el oficio de la política, el encuentro y el intersticio de los posibles modos de trabajar en un lugar que nos daría mas de lo que pudiera imaginar, el ultimo dia de liceo, una celebración que se presentaba como fotos, opacando cualquier momento malo que uno pudiera atravesar, las voces que no pasaban sin pena ni gloria,

la performatividad del discurso, lo inquietante de no saber, llenar el salón, la esperanza de sentir en carne la necesidad de participar, ser parte, parte del ser la necesidad de política.

la escena fundacional, los claroscuros que invadieron el salón en donde hicimos los formularios de ingresos, el papel y computadora dejaron de existir, solo había un entre, nosotres, su retazos de historias y los posibles, nuevos campos y líneas para trazar

el sacudón que hace el pasado en el presente, un jenga mal armado y la esperanza de creer que con la educación todo, un escenario de festividad y cachetadas con tonos y colores de verdad y preguntas, un gesto que se superpone a las creencias y adversidades







¿podemos con la diversidad?

diversidad como derecho.
la educación como maquina, que es lo que puede un docente/estudiante
la evaluación política de responder a los constructos históricos sociales,
la institución funciona porque la dejamos ser, hacer que exista en territorios elegidos o habitando en la contradicción, las marcas identitarias que se borran o reafirman en el escenario educativo, la construcción de sujeto y el sujeto educativo difieren? ¿hay diferencias previas?

revisar la matriz educativa

¿Qué es lo que espero? ¿Qué es lo que puedo?

Conflicto, entusiasmo, que fluya la diferencia, pensar en un espacio en el cual podamos corrernos de nosotros mismos, abandonando creencias y saberes para crear nuevos, pelearme conmigo misma y mis certezas. ¿Qué lógicas educativas defiendo y a cuales renuncio? Curar las grietas de la educación, sin abandonar lo que somos. Rescatar y problematizar las paradojas que guardan o afloran en la escena educativa, que se presentan como casos que no se pueden resolver. Acercar modos de saber, ejercer igualdad de oportunidades, la escuela reprime o libera? Retomo esta noción de la imposibilidad del acceso al Otro, porque al vincularme lo modifico en relación a lo propio, a lo que me pertenece. El otro se me presenta en relación a lo que deseo. La educación es un campo de batalla.

Según Spinoza, los seres humanos son considerados singularidades en constante movilidad, en generación y mutación permanente.

Las singularidades son modos intrínsecos de la Naturaleza, en sí mismos son conatus, potencia interna que los lleva a perseverar en el ser, a regenerarse continuamente, a transformarse.

El conatus, la potencia-ser productiva siempre es en acto y varía de acuerdo a las
afecciones.

Somos tan perfectos como podemos ser de acuerdo a la trama relacional afectiva en la que nos encontramos.

El juego de las afecciones, el poder de afectar y ser afectado genera tanto aumento como disminución de la potencia, una variación intensiva expresada por los afectos.

Diego: gracias por tu sensibilidad, compromiso, energía, calidez y complicidad en este recorrido.
tu forma de laburar es admirable e inspiradora.

Rodrigo: tu particular manera de expresarte sacude, enoja y mueve. La transformación y el deseo como bandera.
Si transité por este espacio, en parte es tu culpa, te agradezco por ello.

Luis: si bien no trabajamos muy a la par, tus intervenciones fueron tan breves como esclarecedoras. Tu precisión y calidez, hicieron de este recorrido más disfrutable. Espero encontrarte pronto en otra instancia y aprender más de ti.

Espero encontrarlos nuevamente, gracias por esta oportunidad y por el aprendizaje. Esta experiencia fue el sacudón que necesitaba para responder a mi duda de que hacer o desde que lugar puedo aportar desde la disciplina que elegí.
Cada lunes y jueves valieron la alegría, dormir poco y soñar mucho.

gracias totales.